Durante los días 21 y 22 de noviembre, tuvo lugar por primera vez en nuestro país el Encuentro Regional de las Américas de la Alianza para el Gobierno Abierto. La Alianza cuenta actualmente con 18 países de América comprometidos en impulsar y fomentar gobiernos más abiertos mediante la promoción de políticas transparentes y participativas, la co-creación de nuevos compromisos de apertura gubernamental, y la rendición de cuentas sobre la gestión pública.

En el marco del encuentro, participé del panel de “Control y Participación Ciudadana” acompañada por Fabián Foresteri, Director de Relaciones Institucionales de la Contraloría General de la República de Paraguay, Claudia Regina Silva, Presidenta y gerenta de transparencia y combate a la corrupción del Observatorio Social de Palmas y la Controladuría General del Estado de Tocantins y Cristian Módolo, gerente de coordinación de la Auditoría General de la Nación (AGN).

Es mucho lo que la comunidad del control puede aportar en la construcción de verdaderos Estados abiertos. En esta línea, Módolo comentó los avances del organismo en relación a los compromisos adoptados con la Alianza para el Gobierno Abierto referidos a la institucionalización de  la participación de la Sociedad Civil en el organismo. Desde este año, las organizaciones no solo pueden aportar al Plan Anual Operativo de la Auditoría, también pueden participar de las instancias de control.

A su vez, Foresteri consideró que “la democracia exige que el control y la rendición de cuentas sea permanente, no solo en elecciones. Ahí entramos los organismos de control”.

Por su parte, la representante de Brasil explicó que “muchas veces las acciones de la sociedad civil pueden resultar más eficientes en el sorteo de estructuras institucionales que en ocasiones pueden depender de voluntades políticas reticentes al verdadero control, transparencia y rendición de cuentas”.

Desde mi lugar actual, como diputada nacional e integrante de la Comisión Parlamentaria Mixta Revisora de Cuentas (CPMRC), aporté lo que considero son los desafíos de esta comisión.

La CPMRC es bicameral y permanente. Sus atribuciones son muy importantes: tiene a su cargo la aprobación del plan anual de control externo de la AGN, el análisis del proyecto de presupuesto anual del mismo organismo, así como también la aprobación o rechazo la cuenta de inversión. En otras palabras, la CPMRC, debiera articular la producción técnica realizada por la AGN con el Congreso Nacional.

Hoy esa articulación es poco dinámica.  Los mecanismos de vinculación no establecen plazos para el tratamiento de los expedientes y tanto sus informes como las versiones taquigráficas de nuestros encuentros, no son públicos y mucho menos accesibles.

Al mismo tiempo, no les podemos pedir a los ciudadanos lo que los funcionarios no hacen. Muchos representantes todavía no conocen las atribuciones de nuestros organismos de control, y mucho menos del impacto de sus informes. Advertencias que al no ser escuchadas no solo significan perjuicios económicos para la administración pública, sino que también se cobran vidas humanas.

Si estamos de acuerdo en la importancia que revisten los informes de AGN y que muchos de los temas que son objeto de control impactan directa o indirectamente en la vida de todos nosotros entonces tenemos que acercar dichos trabajos al conjunto de los involucrados (ciudadanos, sindicatos, OSC, funcionarios, legisladores, medios de comunicación).

Y cuando digo “acercar”, lo pienso al menos desde tres planos.

En primer lugar, un plano temporal: el tiempo de tratamiento de los informes debe ser lo más cercano posible al período auditado. Esto no significa vulnerar el principio del control externo ex post sino acortar aquellos plazos que suman tiempos innecesarios al proceso de aprobación y posterior gestión de los informes.

En segundo lugar, un plano espacial: presentar los resultados de los informes a los actores relevantes en el marco de la auditoría desarrollada. Según la temática analizada por el control público irá variando el universo de interesados pero seguro están las comisiones pertinentes del Congreso Nacional, los propios organismos auditados puestos en diálogo con los auditores, organizaciones de la sociedad civil relevantes en el asunto, medios de comunicación.

En tercer lugar, un plano material: la mera publicación de los informes de auditoría nada nos dice acerca de la accesibilidad real de los mismos. De cuán entendibles son estos trabajos. AGN se ha encaminado a dar respuesta a esta problemática a partir de un trabajo de capacitación para elaborar informes más cortos y con lenguaje más llano y antes desde APOC se ha tomado la iniciativa a partir de la creación de El Auditor.info

Para superar tal estado de cosas es necesario tomar riesgos. Poner la luz sobre áreas y procedimientos que hoy son desconocidos para los no entendidos.

Necesitamos avanzar en la sensibilización acerca del rol del control con OSC y funcionarios de los tres poderes del Estado y jerarquizar el tratamiento de la Cuenta de inversión, cuya importancia como balance de las cuentas del Estado no ocupa la misma atención y tiempo de trabajo que el análisis del presupuesto, entre otros desafíos.

El control es garantía contra el abuso de poder y la mejor manera de prevenir y luchar contra la corrupción. Trabajemos para que la Comisión Parlamentaria Mixta Revisora de Cuentas despliegue todo su potencial y pueda funcionar como herramienta en la construcción Estados más abiertos.

 

Informe Comisión Parlamentaria Mixta Revisora de Cuentas año 2016

Informe Comisión Parlamentaria Mixta Revisora de Cuentas primer semestre 2017

Carla PITIOT